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Liderazgo positivo

Un buen líder no es aquella persona que guía a los demás por medio de mandatos y que asume la responsabilidad de todo lo que sucede en la empresa.

Actualmente, un buen líder es aquél que sabe escuchar las opiniones de los miembros de su equipo, los invita a colaborar mano a mano, promueve la creatividad y comparte las decisiones de la empresa.

Ahora bien, hay muchos estilos de liderazgo que se pueden combinar para lograr el buen funcionamiento de una empresa, uno de ellos es el liderazgo positivo y se enfoca en crear un buen ambiente de trabajo y desarrollar al máximo las destrezas de sus empleados.

A continuación abundaremos en qué es el liderazgo positivo, cómo aplicarlo en una empresa y cuáles son sus ventajas y desventajas.

Breve historia del liderazgo positivo

La historia del liderazgo se puede equiparar a la historia de los grupos humanos. El papel de los líderes siempre ha consistido en guiar y tomar decisiones que afecten a los demás. Sin embargo, la manera de ejercer dichas decisiones se ha transformado a lo largo de la historia. 

Al principio, el estudio del liderazgo estaba dedicado a distinguir a los líderes de los no líderes. Por ello, hubo un enfoque en las características innatas de los líderes; dentro de este marco resalta la teoría del gran hombre, propuesta por Stogdill y también la teoría de Maslow. En la última se propone que el líder es el responsable de satisfacer las necesidades humanas. 

Durante la segunda mitad del siglo XX hay una perspectiva más conductual. Justo en este momento el liderazgo positivo comienza a configurarse y durante estos años se crean diversos estudios experimentales en los cuales se intenta comprender el por qué y el cómo de las conductas humanas. En otras palabras, cómo los empleados responden ante diversas maneras de dirección. 

Posteriormente, a finales del siglo XX, el foco cambia a entender las situaciones. Es decir, a cómo los líderes funcionan en diferentes contextos sociales y en diferentes instituciones. Al mismo tiempo, las situaciones se ven afectadas por el tipo de metas y recursos de los líderes y sus grupos de trabajo. 

La teorías contemporáneas de liderazgo han centrado la atención en el manejo de emociones, la colaboración, trabajo en equipo y las habilidades sociales del líder para motivar y cumplir con las expectativas de sus colaboradores. 

Jimmy Wales: un ejemplo de liderazgo positivo

Uno de los fundadores de Wikipedia, Jimmy Wales, es un claro ejemplo de un líder positivo. Él piensa que todas las personas pueden colaborar con su conocimiento y hacer del mundo un lugar más informado. 

Nació en 1966 en el estado de Alabama, Estados Unidos. Estudió Finanzas en la Universidad de Auburn, donde obtuvo tanto la licenciatura como la maestría y el doctorado en dicho campo. 

Durante muchos años fue maestro en la universidad de Indiana, hasta que decidió comenzar a trabajar como director de investigación en una empresa de Chicago. Jimmy Wales utilizó sus conocimientos de finanzas, invirtió en la bolsa y pronto obtuvo ganancias. 

En el 2000 fundó la empresa Nupedia, dedicada a publicar artículos de manera gratuita. Tanto los escritores, como los editores eran colaboradores que no recibían gratificaciones económicas por su trabajo.  

Nupedia tuvo algunos contratiempos en su proceso, pues aunque la idea de expandir el conocimiento era muy buena, su proceso sufría porque publicar cada artículo tomaba mucho tiempo. Larry Sanger, un amigo y colaborador de Wales, le propuso crear un wiki. Esto son páginas de internet que puedan ser editadas desde el navegador. 

Es así como en el 2001 se creó Wikipedia, la enciclopedia libre y creada de manera colaborativa que hoy en día conocemos. Jimmy Wales es conocido por su gran personalidad y por su preocupación por propagar el conocimiento a todas las personas del mundo. 

¿Qué es el liderazgo positivo?

El liderazgo positivo se refiere a las prácticas positivas que realizan las organizaciones con el fin de obtener cambios que se reflejen en la eficiencia organizativa. Por ello, cuando se utiliza este tipo de liderazgo los empleados se sienten escuchados, valorados y disfrutan el ambiente laboral en el que se desenvuelven día con día.

Dicho estilo de liderazgo busca que los empleados tengan salud mental y disfruten realizar su trabajo. Además, el líder resalta las habilidades y puntos fuertes de cada empleado, promueve el trabajo en equipo y cada persona desarrolla sus habilidades al máximo nivel.

Lo más importante del liderazgo positivo es despertar el interés de los empleados y hacerlos sentir orgullosos cuando hacen su trabajo de forma correcta.

Características de los líderes positivos

Algunas características de los líderes positivos son las siguientes.

  • Motivan a sus empleados y pares a desarrollar sus habilidades y aprender uno del otro.
  • Propician el diálogo constante, la escucha activa y la retroalimentación entre todos los colaboradores. 
  • Conocen muy bien las fortalezas de sus empleados y los motivan a confiar en sí mismos.
  • Presumen el trabajo de su equipo para que otras áreas o departamentos puedan beneficiarse del esfuerzo realizado. 
  • Ven por el bien personal de sus empleados y los motivan a encontrar un equilibrio entre su vida laboral y personal. 
  • Alientan a sus colaborares a decir sus opiniones, los escuchan y les dan un valor similar sin importar su puesto o jerarquía laboral. 

¿Cómo aplicarlo?

Hay ciertas actitudes que se deben desarrollar para aplicar el liderazgo positivo. Por ejemplo, un líder que desee guiar su empresa utilizando este tipo de liderazgo debe saber agradecer a sus empleados por llevar a cabo sus tareas en tiempo y forma. Además, debe fomentar la creatividad de los empleados, de manera que cada uno pueda aportar nuevas maneras de trabajar.

Asimismo, un líder positivo aprende de los errores que él mismo comete y promueve que sus empleados también lo hagan por medio de retroalimentaciones constantes.

La personalidad de un líder positivo es optimista, productivo, creativo, confiable, desinteresado, atento y motivador. Lo más importante es que el líder contagie a los empleados de un sentido o propósito, que les diga hacia qué meta se mueve la empresa y sobre todo que dé sentido a su labor.

Ventajas del liderazgo positivo

Algunas de las ventajas de este estilo de liderazgo son:

  • Los empleados se sienten comprometidos con la empresa, “se ponen la camiseta”.
  • El líder tiene más ideas con las cuales trabajar en su empresa.
  • Cuando hay un buen ambiente de trabajo los empleados son más estables y trabajan de manera más eficiente.

Desventajas

Por su parte, algunas desventajas son:

  • Muchos empleados prefieren que les digan qué hacer y no involucrarse de otra manera en la empresa.
  • No todos los líderes saben o quieren escuchar las ideas de sus empleados.
  • Puede ser más complejo tomar decisiones cuando hay muchos intereses involucrados

¿Cómo ser un buen empleado para un líder positivo?

Los empleados de los líderes positivos son quizá los mejor valorados en sus entornos laborales. Cuentan con el respaldo de sus líderes y de sus compañeros, tienen la posibilidad de opinar y compartir sus ideas, así como de aprender constantemente y desarrollar sus habilidades.

Todos estos beneficios deben ser correspondidos, es por ello que un líder de este estilo buscará las siguientes características en sus colaboradores:

  • Compromiso. Cumplir con sus objetivos, entregar sus trabajos de la mejor manera posible y realizar todo el esfuerzo necesario para alcanzar las metas compartidas.
  • Responsabilidad. Ser conscientes del impacto que tiene su trabajo en el departamento y asegurarse de que se cumplen con los lineamientos esperados.
  • Motivación. Tener una actitud positiva para lograr las metas de la empresa o institución. Así como corresponder con buenos modales al ambiente de trabajo sano que el líder propicia para su equipo. 
  • Apertura. Tener una mente abierta al recibir y dar retroalimentación. Comprender los arreglos o mejoras que debe hacer a sus trabajos y tener una visión de mejora constante. 

El liderazgo con el que combina

El liderazgo positivo combina con el liderazgo transformacional, pues ambos se enfocan en generar cambios en los empleados. Dichos cambios tienen su base en la motivación y el desarrollo de habilidades. 

El liderazgo positivo se especializa sobre todo en mejorar el rendimiento profesional de las personas, tanto de estudiantes como de empleados de grandes empresas. El supuesto sobre el que descansa este estilo de liderazgo es que las actitudes de las personas ante los retos es un factor determinante en el rendimiento.

Por su parte, el liderazgo transformacional se ha aplicado mucho más al ámbito de la esfera privada de las personas, es decir a impulsar cambios de actitudes y visiones mucho más profundas que solo a nivel profesional. 

Si un líder o institución logra combinar estos estilos de liderazgo logrará desarrollar el máximo potencial de sus empleados y generar los comportamientos deseados. 

Recomendaciones para profundizar

Multiplicadores. Cómo potenciar la inteligencia de su equipo. En este libro de Liz Wiseman encontrarás ejemplos reales de algunos líderes que han logrado ampliar las habilidades de su equipo. También conocerás casos de líderes que utilizan malas prácticas y solo limitan a sus colaboradores.

Los líderes positivos son aquellos que ayudan a los demás a aplicar sus capacidades, los contagian de energía y saben cómo aprovechar los recursos de sus equipos. La autora llama “multiplicadores” a este tipo de líderes positivos, pues logran multiplicar las habilidades de su equipo. Este libro es para ti si estás interesado en tener consejos prácticos para convertirte en un líder multiplicador. 

Liderazgo ágil: tips y herramientas para crear equipos ágiles, eficientes y automatizados en un mundo constantemente nuevo. Irati Lekue es un experto en organización de equipos. Tiene más de 8 años de experiencia creando y agilizando procesos en empresas de todo el mundo. En este libro reúne las claves sobre su éxito y comparte algunas de sus tácticas para conformar equipo exitosos en un tiempo récord.

Su enfoque es humanista y está centrado en las personas, por eso motiva a los líderes a fomentar la proactividad, comunicar el propósito del equipo constantemente y crear estrategias de automatización para los miembros de un grupo. 

Ser un líder exitoso y crear un equipo exitoso se basa en crear hábitos inteligentes. Esta es la propuesta de M.C. Londoño e I.C. Robledo en su libro Guía de hábitos inteligentes: 36 pequeños cambios de vida que su cerebro agradecerá. Los autores sugieren que crear mejores hábitos contribuye a tomar decisiones más inteligentes.

Ellos consideran que los mejores líderes han logrado sus metas porque construyen un entorno saludable, lo cual los ayuda a mantener su cerebro de manera óptima y, por ello, ser más rápidos y eficientes en su trabajo.

Sin duda, lo más importante es reconocer qué estilo de liderazgo es el adecuado para la empresa que llevamos y así dirigirla con eficiencia.